Sales del Mar Muerto

El Mar Muerto no es un mar sino un lago de grandes dimensiones situado entre Israel, Cisjordania y Jordania. Está situado a 400 metros bajo el nivel del mar, en sus aguas se diluyen 21 minerales, entre otros bromo, magnesio, potasio, yodo y azufre.

En él se reúnen dos características que son el origen de las propiedades de las sales del Mar Muerto: por un lado la existencia de un remanso de agua, ya que se encuentra rodeado de montañas, y por otro las altas temperaturas que propician un alto grado de evaporación.

La temperatura media anual en la zona es de 31 grados y en verano de 45 grados. Todo ello unido al escaso número de precipitaciones, produce una alta concentración de sales minerales en sus aguas que llega a ser hasta 10 veces mayor que la existente en el Mar Mediterráneo.

Estas sales han sido utilizadas desde la antigüedad por sus propiedades terapeúticas. Pueden usarse disueltas en el agua de la bañera y también como exfoliantes y mascarillas faciales y corporales.

Son muy beneficiosas para las pieles con problemas como psoriasis, eczemas, dermatitis erupciones, etc

Por su capacidad para activar la circulación sanguínea resultan beneficiosas en los tratamientos capilares.

Ayudan a eliminar toxinas y depósitos de grasa que unidos a su capacidad de activar la circulación sanguínea las hacen idóneas para combatir la celulitis.

Dolores musculares, artrosis y reumatismo se ven aliviados con estas sales.

Dosificación: 100- 250 gr en el agua de la bañera